«Vivo enfrente del instituto Bioclimático, pero a mi hijo le han dado plaza en el de Ciudad Jardín, a más de 3 kilómetros de casa, con lo que tendrá que recorrer 7 kilómetros diarios en autobús para ir a clase con solo 11 años». Es la queja de Juan de Amaya, pero también de otras 23 familias que se han quedado sin plaza en este centro de Valdepasillas, pese a ser el más cercano a sus domicilios. 44 de los alumnos que eligieron este centro como primera opción para cursar la ESO no fueron admitidos , pero alrededor de 20 ya han sido reubicados en el instituto Rodríguez Moñino, situado también en este barrio. Para el resto, de momento, no hay vacantes ni en este último ni en el Maestro Domingo Cáceres y se les han asignado plazas en los institutos de Ciudad Jardín y Castelar, ambos a bastante distancia de sus casas, aunque dentro de la zona I, la que les corresponde.

Los padres se han movilizado para pedir a la Consejería de Educación que cree una línea más en el Bioclimático, con lo que se daría cabida a 24 alumnos más, pero aún no han recibido respuesta. Si esto no fuera posible, la «solución menos mala», según Juan de Amaya, sería reubicarlos en el Rodríguez Moñino o el Maestro Domingo Cáceres, ambos en Valdepasillas, pero los afectados son conscientes de que en el primero ya se ha hecho hueco a 20 alumnos más y de que en el segundo también hay familias que se han quedado fuera y están reclamando más plazas.

Estos padres se han concentrado en varias ocasiones a las puertas del Bioclimático para mostrar su malestar y reivindicar la creación de una nueva línea y también se han reunido con diputados del PP en la Asamblea de Extremadura, que han apoyado su reivindicación. A finales de marzo mantuvieron un encuentro con la delegada provincial de Educación, Olga Luengo, que, aunque reconoció las dificultades que había para crear una nueva línea en el Bioclimático por falta de espacio, se comprometió a estudiar su demanda, según los padres, que lamentan que hasta la fecha no hayan tenido respuesta ni hayan sido atendidas sus solicitudes para mantener una reunión. 

A preguntas de este diario, la Consejería de Educación señaló ayer que la creación excepcional de unidades está supeditada al número de plazas ofertadas y también a la disponibilidad de espacios en los centros educativos, situación esta última que se ha agravado en muchos centros debido a la necesidad de hacer desdobles para garantizar las distancias entre los alumnos a causa de la pandemia. En este sentido, recordó que el instituto Bioclimático se está impartiendo todo el Bachillerato en horario vespertino y que tanto en este centro como en el Maestro Domingo Cáceres se aplican las ratios máximas por grupo.

No obstante, Educación precisó que aún se encuentra abierto el plazo de admisión general y que, una vez concluido (este viernes se cierra), se podrá «analizar» la situación tras conocer las solicitudes recibidas. Durante este proceso, los alumnos que no estén conformes con la plaza que se les ha adjudicado inicialmente, pueden volver a solicitarla en otro centro educativo. Los familias que se han quedado fuera del Bioclimático lo han hecho, pero temen que por las mismas razones que argumenta Educación y el número de afectados, sus hijos no puedan iniciar la ESO en un instituto cercano. «Es una incertidumbre y supone un trastorno muy grande», insistió Juan de Amaya, que aseguró que mantendrán las movilizaciones hasta que se les dé una solución.

Tampoco para la treintena de padres cuyos hijos no han obtenido plaza en el Maestro Domingo Cáceres, donde de los 141 solicitantes se ha admitido a 108, la solución vendrá una vez culmine el proceso de admisión general. Estas familias también se han movilizado y han remitido un escrito a la Delegación Provincial de Educación y al secretario general de la consejería para trasladarles una propuesta que, a su juicio, resolvería el problema y evitaría que los niños tengan que desplazarse a diario varios kilómetros para estudiar en el Ciudad Jardín, el Castelar o el Bárbara de Braganza. Quieren una nueva línea en este instituto, pero, conscientes de que existen dificultades de espacio por la pandemia, plantean la opción de que, dado que actualmente cuenta con 6 líneas con 20 alumnos cada una, se incremente esa ratio a 23, «como sucede en otros cursos». También proponen que se haga los mismo en el Rodríguez Moñino, lo que permitiría que «muchos alumnos entrasen en los institutos de su barrio», sin que esto supusiera coste alguno, pues no se necesitarían ni más profesores ni más aulas, defendió Ángel Villa, uno de los padres afectados. De momento, no han recibido contestación.

La zona I, a la que pertenecen los tres institutos de Valdepasillas, el de Ciudad Jardín, Castelar, Zurbarán, Bárbara de Braganza y Los Salesianos, ofertó 743 plazas para primero de la ESO y recibió 731 solicitudes. Los centros con más demanda que vacantes fueron  el Maestro Domingo Cáceres, Bioclimático, Zurbarán y Salesianos. Un 80% de los alumnos obtuvo plaza en el instituto elegido en primera opción y el resto se reubicó en centros de la misma zona de adscripción. El mismo porcentaje de estudiantes ha conseguido entrar en los centros a los que optaba como primera opción en la zona II, con 263 solicitudes para 271 plazas y el instituto de San Roque y el colegio Diocesano San Atón como los más demandados. En la zona III, con 177 vacantes y 149 solicitudes, todo el alumnado estudiará en el instituto deseado.