Cuatro años de prisión. Es la condena que la Audiencia Provincial de Badajoz ha impuesto al acusado de tirotear y herir en el tórax a un conductor en el puente Real en septiembre del 2019. Las partes han alcanzado un acuerdo de conformidad antes de que se iniciara el juicio, señalado para ayer por la mañana, y se ha dictado sentencia en firme en la vista oral. 

El autor de los disparos, con iniciales D. M. G, ha sido condenado a 3 años y seis meses de prisión por un delito de tentativa de homicidio y a otros seis meses por tenencia ilícita de armas, así como a no acercarse ni contactar con la víctima, identificada como M. M. M., por un periodo de 4 años y 6 meses, y al pago de 8.565,5 euros al perjudicado por las lesiones y secuelas sufridas y otros 1.434,5 euros a la compañía aseguradora por los daños causados al vehículo Mercedes en el que circulaba esta última cuando ocurrieron los hechos. Ambas cantidades ya habían sido satisfechas previamente por D. G. M, que está en prisión provisional desde hace 18 meses.

Por su parte, la víctima, que también estaba acusada de un delito de tenencia ilícita de armas, pues en el momento del tiroteo portaba una pistola que ocultó tras ser herido, ha sido condenada a un año de prisión, pena que ha quedado en suspenso condicionada a que M. M. M. no delinca en los tres próximos años y cumpla 240 jornadas de trabajo en beneficio de la comunidad.

En su escrito de calificación provisional, la fiscalía pedía 11 años y 9 meses de cárcel para D. M. G, 9 años y 9 meses por tentativa de homicidio y otros dos por tenencia ilícita de armas. Los hechos ocurrieron sobre la una de la tarde del 21 de septiembre del 2019, cuando el condenado llegó al puente Real a bordo de una motocicleta Aprilia Runner, en la que viajaba en el asiento posterior y que era conducida por una tercera persona no identificado (ambos portaban cascos integrales) y al llegar a la altura del turismo Mercedes en el que la víctima se desplazaba, se apeó y dirigió a su conductor, al que encañonó con una pistola de color negro, efectuando hasta cuatro detonaciones. Dos de ellas perpendiculares al vehículo y otra de forma oblicua, provocando así que un proyectil impactara en el tórax del perjudicado, pese a que este trató de evitarlo cambiándose de carril. El arma utilizada no fue localizada.

A consecuencia del disparo recibido, según el informe médico forense, M. M. M. sufrió un traumatismo torácico por arma de fuego, con orificio de entrada al nivel del quinto y sexto espacio intercostal derecho y salida en la región esternal izquierda, afectando a tejido subcutáneo, para cuya cura requirió un tratamiento quirúrgico consistente en la limpieza de las heridas, aplicación de drenaje quirúrgico y sutura. Tardó en sanar de sus lesiones 15 días, dos de ellos con perjuicio grave, y le han dejado como secuela tres cicatrices de perjuicio estético «ligero». Además, los cuatro tiros ocasionaron desperfectos de diversa consideración en el Mercedes.

Tras efectuar los disparos, D. M. G. regresó al lugar en el que lo esperaba el conductor de la motocicleta, huyendo de la zona. Aunque en principio la Policía Nacional detuvo a dos personas el mismo día de los hechos, al ahora condenado, y a la que presuntamente conducía la motocicleta, finalmente esta última no ha sido procesada.

La víctima, tras recibir el impacto en el tórax, se bajó de su coche con una arma de fuego corta en la manos, en concreto una pistola Walter modelo TPH de calibre 6,35 milímetros, con su cargador y cartuchos, y la ocultó entre unos cipreses en una zona ajardinada junto al puente Real. Para acordar la suspensión de la pena por tenencia ilícita de arma para M. M. M., la fiscalía ha tenido en cuenta que no hizo uso de ella tras ser tiroteado.

El abogado de la defensa, Idelfonso Seller, se mostró satisfecho por el acuerdo alcanzado por la defensa, la acusación particular y la fiscalía, «ajustando» las penas por los delitos de tentativa de homicidio y tenencia ilícita de armas para su cliente, teniendo en cuenta que este último ha reparado «el daño absoluto» con el pago de la indemnización por las lesiones y los desperfectos al vehículo, «incluso por encima» de la petición del Ministerio Público y del letrado del herido en el suceso.