La Fiscalía de Badajoz solicita 35 años de prisión para J. M. M. C, acusado de ser el presunto autor del asesinato de Jonathan F. H., que recibió tres tiros con una pistola , y del intento de asesinato de F. J. S. F, primo de la víctima mortal. Los hechos ocurrieron la mañana del día Navidad del 2019 en el bar JM, en la avenida Juan Sebastián Elcano, propiedad del padre del procesado, regentado por su hermano y en el que él estaba trabajando como camarero en ese momento.

En su escrito de calificación, la fiscalía recoge que el fallecido y la víctima, conocidos desde la infancia por el acusado y sus familiares, estuvieron el día de Nochebuena en el bar JM hasta las diez de la noche, al que regresaron sobre las seis de la mañana del 25 de diciembre, cuando el local tenía las persianas semibajadas y solo accedían al interior conocidos. Cuando llevaban una hora dentro consumiendo alcohol, J. M. M. C., cogió una pistola (marca Sig-Sauer de 9 milímetros Parabellum), propiedad de su hermano y que tenía escondida detrás de la barra, y «sin mediar palabra y de forma sorpresiva» se dirigió hacia donde se encontraban las víctimas. Primero apuntó con el arma y efectúo un disparo sobre Jonathan F. H. a una distancia de 1,5 metros, al que siguió un segundo tiro a 40 centímetros y un tercero a un distancia de entre 70 y 100 centímetros, «con el objeto de asegurar y culminar su propósito sin que la víctima tuviera posibilidad de defenderse». El primer disparo impactó en el hombro, el segundo en el codo y el último afectó al corazón, hígado y riñón, provocando una hemorragia que provocó su muerte a las 7.30 horas. Jonathan tenía 27 años y una hija de 6.

Según el Ministerio Fiscal, con el mismo objetivo de quitarle la vida, J. M. M. C. encañonó al primo del fallecido, al que amenazó diciéndolo «o te vas o te mato», pero cuando fue disparar contra él el arma se le encasquilló y no pudo hacerlo. El acusado arrojó el arma al suelo, que cogió un tercero y sacó del local, pero el primero la recuperó, hasta que finalmente se la entregó a una mujer, que presuntamente la ocultó e un solar cercano, donde fue recuperada por la Policía Nacional después.

F. J. S. pudo arrastrar el cuerpo de Jonathan fuera del bar, donde ambos supuestamente fueron golpeados por el padre del principal inculpado. Tras los hechos, ayudados por un amigo, los acusados limpiaron con detergente y lejía el establecimiento.

En la causa, que juzgará un jurado popular y para la que aún no hay fecha fijada, además de J. M. M. C., están acusados su hermano y su padre, para los que la fiscalía pide 2 y 1 año de prisión por tenencia ilícita de armas y lesiones, respectivamente, así como la mujer que presuntamente ocultó la pistola y el amigo que ayudó a limpiar la escena del crimen, para los que solicita un año de cárcel para cada uno por encubrimiento.

La acusación particular que, ejercen Fernando Cumbres en representación de la familia del fallecido, y Álvaro Cumbres, como letrado del F. J. S., solicitan para el principal acusado 38 años y nueve meses de prisión por los delitos de asesinato, tentativa de asesinato y tenencia ilícita de armas, mientras que para el resto piden penas de entre 3 y 8 años de cárcel por delitos de lesiones, amenazas, tenencia ilícita de armas, encubrimiento y destrucción de pruebas.

Por su parte, el abogado del acusado de asesinato y su hermano, Enrique González de Vallejo, y el letrado del padre de ambos, Juan Carlos Bodes Perogil, no recibieron hasta ayer el escrito de calificación del Ministerio Fiscal, que están estudiando para presentar sus escritos de defensa.