Lleva pocos meses al frente de la Concejalía de Urbanismo y no ha tardado en darse cuenta de un problema que persiste y que consiste en la dispersión de los servicios municipales que dependen de este área por distintas ubicaciones, situación que perjudica la atención al ciudadano y la propia operatividad. El concejal de Urbanismo, Carlos Urueña, quiere que los servicios de este área y Vías y Obras (delegación que también ostenta) se puedan reunificar en un único espacio y ha pensado en el edificio del antiguo Hospital Provincial, ahora que la Diputación de Badajoz, como propietaria del inmueble, ha puesto a disposición del ayuntamiento 14.000 metros cuadrados de la segunda fase de rehabilitació para que ejecute propuestas de carácter público con dotación presupuestaria. Urueña ha abierto los cinco sentidos y ya está empezando a mover su propuesta.

La Concejalía de Urbanismo tiene en estos momentos repartidos servicios en la calle Mayor, en el centro comercial que hace esquina con la calle Santo Domingo y en el inmueble de enfrente (Licencias, Urbanismo, Control y Disciplina Urbanística), Protección Ambiental en la calle Felipe Checa (junto a Zara), Planeamiento en Vicente Barrantes y Vías y Obras en el palacio consistorial, en la plaza de España.

El concejal recalca que unificar todos los servicios en un mismo espacio permitiría un mejor servicio a los ciudadanos, que en ocasiones tienen que desplazarse de un lugar a otro para rematar los trámites, y también facilitaría el trabajo de los técnicos. Además la dispersión supone un mayor gasto de personal y material.

Los trámites / El primer paso sería solicitar a la diputación poder entrar en el inmueble para que los técnicos municipales conozcan su estado y la reforma que requiere para calcular el coste de la adecuación. Urueña deja claro que el objetivo que se marca es a corto o medio plazo.

De la centralización de los servicios de Urbanismo se lleva hablando años. Los de Urbanismo y el de Control y Disciplina Urbanística se trasladaron a las oficinas de Juan Carlos I en marzo del 2008. Se encontraban en la segunda planta del ayuntamiento con importantes problemas de espacio. En aquel momento, el concejal Celestino Rodolfo señaló que era un traslado provisional, pues la pretensión del equipo de gobierno era que todos los servicios de Urbanismo se centralizasen en el antiguo Convento de San Agustín, un edificio del siglo XVI situado junto a la iglesia del mismo nombre, en la calle Chapín, y que albergó el colegio San Pedro de Alcántara. De este proyecto nunca más se supo.