A principios del siglo XXI parecía que Badajoz estaba a punto de dar un salto histórico. Venía de ser una de las ciudades de mayor crecimiento de España de la década de los 90. Se había conectado por autovía con Madrid y Lisboa, El Corte Inglés impulsó la atracción y modernización del comercio, el Plan Urban permitió empezar a recuperar el patrimonio histórico y el Casco Antiguo y con ello nuestra identidad y la decisión en el 2003 de que tendríamos el AVE en el 2010 y la Plataforma Logística nos generó nuevas expectativas. Con el Observatorio del Cambio empezamos a pensar en un futuro mucho mejor y a creérnoslo. Después vino una burbuja inmobiliaria y financiera que impulsó un crecimiento sin precedentes en todo el país y la explosión de la burbuja nos afectó directamente con la pérdida de nuestra principal entidad financiera local y las promociones inmobiliarias públicas desproporcionadas que paralizaron la actividad económica de la ciudad. Perdimos la ilusión y la esperanza, y hasta el carácter amable, y reaparecieron enfrentamientos y conflictos en la ciudad a los que no estábamos acostumbrados.

De nuevo la ciudad parece que está a punto de dar el salto. Con el plan DUSI se reinician acciones de recuperación del patrimonio histórico y de barrios, a la plataforma logística ya se le ve la cara con la urbanización y la instalación de empresas, la eurociudad comienza a caminar, hay de nuevo edificios construyéndose por la ciudad, habrá mejoras sustanciales en el tren en un año y empezamos a confiar en tener alta velocidad y conectarnos con Lisboa, el Plan Campillo es ya irreversible, ha comenzado la Ronda Sur, el río Guadiana aporta muchas posibilidades y tendremos pronto la nueva piscina cubierta, la alcazaba y las murallas están poniéndose en valor, a la base aérea este año llegarán los nuevos aviones reapers, el sector sanitario iniciará un nuevo hospital privado y la nueva facultad de Medicina está en marcha, y así otros proyectos que llevaban décadas esperando que empiezan a ser más que expectativas. De nuevo la ciudad parece que está a punto de dar un salto histórico. Esperemos que estas posibilidades dentro de cuatro años sean todas realidades.