La calzada de la avenida Sinforiano Madroñero se va a reordenar antes de que termine el año para facilitar la circulación de las bicicletas, lo que permitirá unir el carril bici entre el puente Real y Jaime Montero de Espinosa. Los cuatro carriles para vehículos se convertirán en seis, de forma que el más cercano a la acera de ambos sentidos será compartido por los ciclistas y los conductores de turismos, que no podrán superar los 30 kilómetros por hora.

Esta actuación pasó el martes por la comisión municipal de Seguridad Ciudadana, Tráfico y Transportes. Las medidas acordadas responden a la consulta que realizó el ayuntamiento a la Dirección General de Tráfico y serán sufragadas con cargo al Plan de Impulso a la Economía Local, que reserva una partida de 140.000 euros. El primer teniente de alcalde, Germán López Iglesias, defendió ayer que cuentan con el beneplácito del fiscal de Tráfico, de las plataformas de ciclistas y de todos los grupos municipales.

El carril del extremo derecho se diferenciará de los otros dos con iconos de la limitación de 30 en el suelo y de bicicletas. En el último tramo de bajada de la avenida, próximo a Caldas de Reinha, existe carril bus, que se protegerá del de las bicis con las lengüetas captafaros. En esta parte de la avenida, como hay más carriles, habrá que acometer una obra recortando medio metro el acerado. A su vez, el vial de 30 se diferenciará del de los coches, con separadores de carril luminosos en relieve. Además, dentro se colocarán cojines de calmado, que son una elevación de la calzada que obliga a los vehículos a reducir la velocidad, pero se instalarán de forma que puedan pasar las ruedas de las bicicletas. En los viales de 50 kilómetros también se habilitarán pero más distanciados. Según el superintendente de la policía local, Rubén Muñoz, estos cambios permitirán reducir la doble fila. Además, en el tramo entre las glorietas de Víctimas del Terrorismo y de Herrera Pombo, los aparcamientos a ambos lados de la avenida serán «en espiga», es decir, en batería en oblicuo, con acceso marcha atrás para que el conductor vea a los ciclistas cuando entre por el retrovisor y, al salir, porque lo hará hacia adelante. Muñoz informó de que a partir de ahora los aparcamientos en batería que se habiliten en la ciudad se harán en «espiga».

López Iglesias avanzó que «seguramente» esta reordenación se traslade a otras avenidas cuando se comprueben los resultados. Se han realizado pruebas en el primer tramo cercano a la rotonda de Isabel de Portugal, donde se han habilitado tres carriles para determinar cómo reaccionaba la circulación. H