"Lo fundamental del acto ha sido el calor de las palabras que se han pronunciado". De esta manera describió ayer Isabel María Pérez, presidenta de la Asociación de Escritores Extremeños, la jornada que tuvo lugar en el Museo Extremeño e Iberoamericano de Arte Contemporáneo (Meiac) consistente en el homenaje al periodista y poeta extremeño José Miguel Santiago Castelo, fallecido el pasado mes de mayo. Todos, autoridades y amigos, glosaron el fértil recorrido por el mundo de las letras del granjeño y sacaron a relucir anécdotas y sentimientos en torno a su figura.

El acto comenzó a las diez. Entonces, Guillermo Fernández Vara, presidente de la Junta de Extremadura, le definió como "gran ejemplo de vida para esta tierra y un hombre culto y bueno", en un tono nostálgico que repetirían todos los ponentes. La jornada también contó con la presencia de Miriam García, secretaria general de Cultura; Francisco Javier Fragoso y Felipe Gahete, alcaldes de Badajoz y de la Granja de Torrehermosa respectivamente; y Miguel Angel Gallardo, presidente de la Diputación de Badajoz y alcalde de Villanueva de la Serena, de donde Castelo era hijo adoptivo.

Tras las autoridades, amigos del periodista desgranaron todas las facetas de su prolífica vida. Los recuerdos del Castelo escritor; el poeta; el académico; el amigo o el bibliófilo inundaron el micrófono del salón de actos del Meiac a través de las voces más autorizadas: sus amigos, aquellos que compartieron momentos con él. También hubo lugar para la lectura de algunos de sus versos. Esos que se desprenden de su tierra y que supieron emocionar, ayer, a gran parte del público.

Ahora, como señala Isabel María López,hay dos objetivos que perseguir. El primero, que permanezca vivo en el recuerdo de los más jóvenes, de las nuevas generaciones de extremeños. Por ello, se eligió como conductora del acto a Paula Soto, una alumna del Instituto Bárbara de Braganza. Y el segundo, recoger todas las ponencias de ayer (de Teresiano Rodríguez; Francisco Muñoz; Miguel Angel Lama; María Dolores Corrales; Antonio Reseco; Manuel Pecellín; José Luis Bernal y Carmen Fernández Daza) en un libro para evitar que se quede sólo en un acto de homenaje.

La jornada terminó algo pasadas la una y cuarto de la tarde con la emotiva proyección de la lectura de Santiago Castelo en el Aula de Poesía 'Enrique Díez Canedo' de la Aeex. "Destacaría la cercanía, la emotividad y el compromiso de todos los asistentes con el acto en sí mismo. Todo el mundo estaba comprometido para que el acto resultara bello, entrañable, ágil y entretenido", valoró la presidenta de dicho colectivo.