Cáritas Diocesana de Mérida-Badajoz quiere entablar vínculos de colaboración estables y duraderos con las empresas con presencia en la región --pequeñas y grandes-- y fundaciones privadas para que se impliquen en los proyectos y acciones sociales que desarrolla la oenegé. Para ello, ha puesto en marcha el programa Empresas con corazón , a través del que pretende promover la responsabilidad social empresarial para que sean partícipes del objetivo último de Cáritas: ayudar a los colectivos más desfavorecidos.

El director de Cáritas, Juan Enrique Pérez, que ayer presentó la iniciativa, destacó que el apoyo de las empresas resulta "fundamental" en estos momentos de crisis para la oenegé, pero no solo por la ayuda económica que puedan proporcionar para seguir atendiendo una demanda asistencial que les desborda, sino porque su papel es "vital" para integrar y promocionar a las personas a través del empleo.

¿Cómo pueden colaborar las empresas con Cáritas? La oenegé plantea distintas fórmulas, que tendrán una contrapartida en función del tipo de compromiso que estas adquieran, aunque en ningún caso --aclaró Pérez-- se tratará "de cambiar pegatinas por dinero, porque de lo que se trata es de comprometer a la empresa con el bienestar social en general".

Así, las empresas podrán sumarse a la iniciativa (como socios o donantes) con la cesión de servicios, proyectos o instalaciones; mediante patrocinios; apoyos directos a proyectos concretos; facilitando la incorporación laboral de las personas que atiende el programa de empleo de Cáritas; con la donación en especie; aportando horas de trabajo como voluntarios los profesionales de distintas; o difundiendo la labor de la oenegé a través de sus propios soportes tecnológicos.

Las contraprestaciones para los empresarios que se adhieran a este proyecto también son, según la oenegé, muchas. En este punto, los responsables de Cáritas citan, además de los beneficios fiscales establecidos por ley, la "valoración positiva" que obtendrá de clientes, proveedores y los propios empleados por su compromiso social, lo que puede suponer "una ventaja competitiva" en el mercado, así como la difusión que Cáritas realizará de esas acciones tanto en medios internos y externos.

El director del Cáritas, que estuvo acompañado por Andrés Guerra, coordinador del proyecto, y el responsable de Comunicación, Francisco Delgado, reconoció que este proyecto no es "ni nuevo ni original", pues ya funciona en Barcelona desde los años 90. Lo que sí supone una novedad --según destacó-- es que se decida llevarlo a la práctica cuando las empresas no viven su mejor momento. Pero la difícil situación económica es precisamente lo que les ha llevado a embarcarse en esta iniciativa, pues sus responsables consideran que la crisis está haciendo que las empresas sean más conscientes que nunca "de la realidad" y se den cuenta de que "deben cambiar los valores".

Hasta ahora, según Delgado, Cáritas ha contado con el apoyo de empresas y otras entidades privadas, pero "no de forma sistemática y formal" y lo que se pretende con este proyecto es dar "mayor formalidad y rigor a esa relación".

La oenegé ha puesto en marcha un blog (http://empresasconcorazon.blogspot.com.es ) a través del que los empresarios interesados pueden informarse y contactar con el equipo de voluntarios y técnicos que están al frente de la iniciativa. Además, Cáritas tiene previsto trasladar al iniciativa a la Cámara de Comercio de Badajoz y a otras organizaciones empresariales para la que la difundan entre sus asociados.