"Es espectacular. En ninguna calle se repiten los adornos. Tiene un trabajo increible". Este era el veredicto de Carmen y Delfina, dos hermanas de Navalmoral de la Mata, tras su primera visita a la localidad portuguesa de Campomayor, donde desde ayer, y hasta el próximo domingo, 23 toneladas de papel en forma de flores cubren más de un centenar de calles con motivo de las Festas do Povo.
Francisco y Josefa llegaron desde Badajoz. Nunca faltan a la cita con la fiesta de las flores, pero aseguran que "siempre nos sorprende". Como ellos, miles de personas --muchos procedentes de diferentes puntos de Extremadura-- recorrieron ayer las calles de Campomayor para disfrutar del trabajo ingente de decenas de vecinos del municipio portugués.
Miles y miles de flores de todo tipo convierten a Campomayor en un jardín gigante de papel. Hay calles en las que la flor es la protagonista, pero otras están inspiradas en diferentes motivos: la selva (con animales de cartón); los barcos piratas; el café...En todas predominan los colores fuertes y en todas se escuchan sin cesar las tradicionales saias (música popular). Los vecinos explican que la decoración de las calles se guarda en secreto, por eso hasta la noche antes no se comienzan a engalanar. "Muchos no han dormido, porque cuando terminan la suya van a ver cómo ha quedado el resto", cuenta una vecina.
Las fiestas tienen un presupuesto de 800.000 euros, pero la repercusión en la economía local será mucho mayor. Restaurantes, bares, comercios y hoteles estaban ayer hasta la bandera. Otra fuente de ingreso son los aparcamientos, se han habilitado (hasta 20.000) a cinco euros. Solo se puede acceder al casco urbano en coche si se posee la tarjeta de libre tránsito.
Ejemplo de recuperación
A la inauguración de las Festas do Povo, que no se celebraban hace 7 años, asistieron el presidente de la República de Portugal, Aníbal Cavaco Silva, y el jefe del ejecutivo extremeño, José Antonio Monago, entre otras autoridades. Junto al alcalde de Campomayor, Ricardo Miguel Furtado, el comendador Manuel Rui Nabeiro, y el presidente de la Asociación de las Festas do Povo, Joao Rosinha, participaron en el acto de apertura oficial. En sus intervenciones destacaron que se trata de "un espectáculo único y sin fronteras", que en momentos de gran dificultad económica como los que vive Portugal en estos momentos, convierte a Campomayor en "ejemplo" de perseverancia, esperanza y optimismo.
"En este tiempo menos afortunado debe ser ejemplo de unidad y recuperación del país", dijo Cavaco, quien resaltó los lazos que unen a Portugal y Extremadura. Prueba de ello --añadió--era la presencia del presidente de la Junta y de miles de extremeños en las calles abarrotadas.
Monago agradeció las muestras "de cariño" y comentó que "Campomayor es también un poco Extremadura, porque hay vecinos de multitud de localidades de la región disfrutando de estas fiestas, que son una joya".
