El Badajoz, con bajas sensibles, pero espoleado por su hinchada

El Badajoz se juega la vida este sábado a las 19.30 en el duelo decisivo ante el Pontevedra. El equipo de David Tenorio ya no tiene margen de error frente a un equipo que ya no tiene opciones al haber descendido la pasada jornada. Este choque es caminar por la cuerda floja sin tener red que pueda sostener una posible caída. Tal es la trascendencia del envite que el club está tratando de generar un gran ambiente para esta cita. Este jueves ya habían confirmado que se han vendido más de 5.000 entradas de forma anticipada. A este dato hay que sumar además los abonados, por lo que se presume que habrá nuevamente cifras de récord en el Cívitas Nuevo Vivero en el que será el último partido de liga como local para el conjunto pacense. Una de las iniciativas más llamativas para esta jornada es la de facilitar a distintas empresas y asociaciones de la ciudad un paquete de entradas para facilitar el acceso a empleados y miembros de dichos colectivos.

Además, el club ha ‘convocado’ a su afición para que le den un caluroso recibimiento a los futbolistas el próximo sábado a partir de las 17.30 en los aledaños del estadio. A ello se unirán todo tipo de actividades organizadas por distintas agrupaciones que conforman la hinchada pacense para vivir una intensa previa en este día de final.

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Bajas importantes

Si el Badajoz andará sobrado de apoyo fuera del césped, en el verde tendrá varias bajas importantes. David Tenorio tiene dos bajas importantes en el eje de la zaga -Mariano y Josete, que fueron expulsados en Ferrol- y otras tantas en la medular: Mancuso vio la doble amarilla la pasada jornada y no podrá estar, ni tampoco podrá contar con el lesionado Raúl Palma. También está sancionado el preparador físico Curro Velázquez después de su expulsión en A Malata el pasado domingo.

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