El Badajoz se agarra a sus opciones coperas en su último partido de la temporada. El equipo pacense despide la liga este sábado a las 18.30 ante el Rayo Majadahonda ya sin ningún tipo de opción de alcanzar las cinco primeras plazas que dan acceso al playoff de ascenso, aunque aún tienen la posibilidad de clasificarse para los puestos que permitirían jugar la Copa del Rey la próxima temporada. El billete para el torneo del ‘ko’ está reservado para los cinco primeros sin contar filiales. Por tanto, para poder llegar a esos puestos, está obligado a ganar al Rayo Majadahonda y que el resto de resultados de la jornada le favorezcan, ya que el Celta B es uno de esos filiales que está inmerso en las primeras posiciones y cuyo puesto no cuenta para esta clasificación.
La historia reciente del Badajoz con la Copa guarda grandes recuerdos y algún que otro sinsabor. En primer lugar, esta fue la competición fetiche del Badajoz en la temporada 2019-2020, dónde alcanzaron los octavos de final tras eliminar al Amorebieta en primera ronda y hacer lo propio con Las Palmas y Eibar en las siguientes. Finalmente, fue el Granada quien derrotó a los blanquinegros y terminó con este mágico periplo en un partido muy igualado en el que los nazaríes precisaron de la prórroga.
Pero las dos siguientes experiencias coperas no fueron tan prolíficas para el Badajoz. En la 2020-2021, el Navalcarnero fue el verdugo del equipo que por aquel entonces entrenaba Fernando Estévez en una de las pocas derrotas que sufrieron durante esta temporada. El último precedente data de este mismo curso, cuando el Alcoyano asaltó el Nuevo Vivero en la primera eliminatoria del torneo.
Aunque el futuro de la próxima temporada se ve aún algo traslúcido debido al panorama de incertidumbre que reina en la entidad, lo cierto es que asegurarse este billete copero puede ser un añadido extra para el club.
