Luis Oliver, socio de Lanuspe, empresa que gestiona el Badajoz, regresó a una a aparición ante los medios de comunicación para abordar la agitada actualidad que rodea actualmente a la entidad blanquinegra. El inversor cargó duramente contra la plantilla blanquinegra tras el gesto de arrodillarse que llevan haciendo en los últimos dos encuentros y afirmó mostrarse muy contrariado porque realizaran esta reivindicación tan solo un día después de pagar las nóminas a la plantilla. «El día que se pusieron de rodillas ha sido el único día que el fútbol me ha hecho llorar por algo que no ha sido de alegría», aseguró en la entrevista a Canal Extremadura.
Sobre los propios pagos, Oliver aludió a un problema de la aplicación que hace las transferencias y que por ese motivo no se pudo pagar a toda la plantilla. Posteriormente, también criticó a los futbolistas y aseguró que en la última semana faltó intensidad en los entrenamientos. «La semana del Valladolid no entrenaron e hicieron el paripé», comentó.
Además, el que aspira a ser el propietario del club blanquinegro restó importancia a la declaración del preconcurso de acreedores al que han llevado al Badajoz desde Lanuspe. «La única manera de poner orden era ir al preconcurso. En mi opinión, igual no hace falta concurso. Los acreedores están colaborando», explicó.
Respecto al cambio de manos de la entidad blanquinegra, el propio Oliver se ha referido al retraso jurídico que ha llevado todo el proceso y asegura que la parte vendedora firmará, porque de lo contrario se expone a consecuencias legales. «Si Parra no firma, tendría una querella criminal por estafa», declaró en la entrevista.
Por último, concluyó su intervención poniendo en valor una gestión en la que afirma que está poniendo en grave riesgo su patrimonio para sacar al club adelante. «Los abogados nos recomendaban que no pusiéramos nada hasta no ser propietarios», sentenció.
