Cada hora cuenta en el Nuevo Vivero porque en cualquier instante pueden llegar novedades decisivas. El Badajoz se acerca al momento clave para decidir su futuro y mantiene en vilo a todo el conglomerado que tiene peso en el cuadro blanquinegro: jugadores, trabajadores y aficionados están muy pendientes de conocer un incierto desenlace en el que se anhela recuperar la estabilidad perdida, aunque también existe el temor de que el club termine colapsando debido al desamparo económico y estructural que tendría si la familia Parra no accede a vender.
Lo que sí que parece claro es que ante esta situación adversa existe una unión sin precedentes en todos los estamentos del club. Las antiguas rencillas y diferencias han dejado paso a una comunión total en la que la hinchada blanquinegra, la dirección de la entidad y los futbolistas de la primera plantilla, así como las del equipo femenino, el filial y el juvenil de División de Honor han elevado la presión para lograr que la propiedad acabe accediendo a una venta que se complicó el pasado fin de semana con un Daniel Tafur que retiró su oferta, pero que, pese a ello, sigue interesado en que la operación acabe cristalizando. La familia Parra, por su parte, se manifestó a través de un comunicado en el que trataron de exponer su versión.
Comunicado de las peñas
Aunque durante esta intensa semana ya se habían pronunciado desde la Federación de Peñas, así como la Peña Capital Blanquinegra, este miércoles también se han expresado las peñas federadas, no federadas, así como la grada de animación blanquinegra. En dicho texto muestran su incondicional apoyo a las distintas plantillas que han manifestado la insostenible situación que vive el club y afirman que les respaldarían en caso de huelga. Al mismo tiempo, instan a la propiedad a que efectúe la venta y a que miren por las más de 70 familias que dependen económicamente del club y que «no dejen que el sentimiento muera».
Rayo - Badajoz, el sábado
Salvo que los hechos digan lo contrario, el Badajoz recuperará su encuentro aplazado ante el Rayo Majadahonda este sábado a las 19.00 horas. El choque, correspondiente a la jornada 17, que debería haberse disputado el pasado 19 de diciembre, acabó siendo aplazado por los casos positivos de covid-19 que se registraron tanto en pacenses como majariegos.
Este choque, que será el penúltimo de la primera vuelta, servirá para ponerse al día a los blanquinegros, mientras que el Rayo aún tiene pendiente el envite frente al Tudelano. Este podría ser un directo si los de Óscar Cano obtiene el triunfo en la complicada plaza madrileña.
