La Crónica de Badajoz

La Crónica de Badajoz

Ascensión Martínez Romasanta

La rotonda indultada

La rotonda de la discordia. SANTIAGO GARCIA VILLEGAS

A los vecinos de la Dehesilla de Calamón no les gusta, y con razón, salir día sí y otro también en los medios de comunicación y todo por una pequeña rotonda cuya existencia seguramente poca gente conocía hasta que se hizo público que el Ayuntamiento de Badajoz los obliga a demolerla. Posiblemente pocos pacenses han rodeado esta glorieta, que solo utilizan los conductores de esta urbanización, de otras con las que enlaza o los usuarios de un club de tenis.

La junta directiva de la asociación de propietarios tomó la decisión de construirla como medida de seguridad vial para regular el tráfico en este cruce. La Dehesilla de Calamón es un Núcleo Urbano Secundario y tiene muy limitadas las actuaciones permitidas. Los vecinos saben que se encuentran en un «limbo legal» del que ahora quieren salir, pero que de momento les impide acometer obras como ésta. De hecho habilitaron la rotonda sin licencia del ayuntamiento. Nadie se habría enterado de su infracción si no hubiese habido un conflicto entre dos vecinos. Uno de ellos avisó al ayuntamiento de que existía una rotonda sin permiso. Estaba a la vista y la policía local solo tuvo que acercarse para confirmarlo. El ayuntamiento no tuvo más remedio que abrir expediente. Dos expedientes: el sancionador y el de restitución de la legalidad urbanística. 18.600 euros de multa por una obra que está valorada en poco más de 1.300. Es lo que tiene no cumplir la ley. La asociación de propietarios, que en aquel momento tenía otra junta directiva, recurrió la decisión municipal y su abogado ganó por una cuestión de forma: el ayuntamiento había alargado demasiado el procedimiento y el expediente había caducado. La multa ya estaba pagada. Quedaba el segundo expediente que, en esta ocasión, los vecinos han perdido, y tendrán que demoler la rotonda y volver la situación de los viales a su estado anterior. El ayuntamiento no se va a conformar y, como ya es de dominio público, no se va a dejar cuestionar y ha vuelto a abrir el expediente sancionador, porque caducó el procedimiento pero la infracción, que es grave, no ha prescrito.

La junta directiva de la asociación de propietarios que tomó aquellas decisiones, tanto la construcción como presentar los recursos contra el ayuntamiento, ya no está. La nueva lleva cuatro meses y se ha encontrado con este marrón. Un marrón que era suyo antes, desde que son vecinos de esta urbanización. Esta nueva junta directiva no quiere problemas con el ayuntamiento, que tiene la sartén urbanística por el mango. Ahora están trabajando para convertirse en Asentamiento Rústico para regularizar su situación y van a tener que sentarse en más de una ocasión con los responsables municipales. No quieren mal rollo con la administración a la que van a necesitar en este complicado proceso. Parten además del convencimiento de que la rotonda no se tenía que haber construido. 

Pero a ver, si ya está hecha y cumple su función, la lógica indica que se debería mantener, aunque la sanción siguiese adelante. En Urbanismo defienden que no pueden permitirlo porque sentaría un precedente y además supondría un agravio comparativo respecto a promotores que desarrollan sectores con las correspondientes cesiones y dotaciones. Tiene su sentido. Pero debería existir una fórmula que permitiese, por un lado, reprender a los infractores, de manera que sirviese de escarmiento, y al mismo tiempo se pudiese valorar el interés social de la obra ilegal para salvarla. Si la glorieta de la Dehesilla ha contribuido y contribuye a que se produzcan menos accidentes de tráfico en un cruce de caminos, déjenla en pie y cuando esta urbanización se regule, si esta glorieta se puede legalizar, se hace y, si después no casa con el planeamiento diseñado porque existen otras soluciones mejores, se levanta. Hasta entonces, habrá que sopesar qué es lo más sensato, como en todo. Si la conclusión es que su comportamiento en la lidia ha sido bueno, puede que merezca el indulto.

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