Es sabido en Arqueología, aunque hay quien parece no haberse enterado, que los cambios políticos no suelen tener un impacto inmediato en el llamado registro material, en el ajuar y en el utillaje de la gente. Los procesos de cambio cultural son lentos, a pesar de desarrollarse a veces con cierta rapidez. Otra cosa muy diferente es lo que ocurre con las obras oficiales, las erigidas por los poderes políticos. Por eso, puede resultar equívoco hacer coincidir las fases arqueológicas -marcadas por los cambios en las producciones industriales de cada momento histórico- con aquéllos. Y eso es uno de los aspectos más equívocos en la organización tradicional de los períodos de la historia de Al-Ándalus. Al pasar del emirato al califato no debieron apreciarse variaciones importantes en la vida de las gentes, salvo en las fundaciones de los monarcas y en los objetos a disposición de las oligarquías.

Y, desde luego, está por ver que la conquista de todo el territorio andalusí por los emires almorávides introdujese cambios apreciables. Se atribuyen fechas almorávides, injustificadas e injustificables, a hallazgos difícilmente indiferenciados de la fase histórica de los Reinos de Taifas. No niego que en algunos puntos de nuestra geografía hayan aparecido restos fechados entre finales del siglo XI y mediados del XII -cuando dominaban los Velados-. Estadísticamente hubo de construirse algo, fuese lo que fuese, si bien en Badajoz lo más evidente, por ahora, fueron las destrucciones del muro, o de parte de él, del Arrabal Oriental. A los hallazgos arqueológicos me remito. Y no es muy distinto el panorama en la totalidad del mundo andalusí. Acaso se restauró, pero en apariencia se destruyó más que se construyó. Hablemos, pues, de siglos y no de períodos políticos. Y cuéntese, siguiendo los procedimientos técnicos al uso, cómo se ha llegado a ciertas conclusiones. Hay un exceso de afirmaciones sin pruebas evidentes y demasiado pocos razonamientos constatables. Dejemos de engañar y de engañarnos. ¿Ya no son de un baño -hammam- parte de los restos descubiertos en la zona de la puerta del Alpendiz? Falta saber, si es así, cómo se llevaba el agua indispensable y dónde están el resto de sus dependencias.